CGP 12 – Avant-projet
Concours / 2500 m2
Associés : Architectes Esteban Arcuschin et Sebastian Villafañe.
Buenos Aires, 2012
Las personas de una comunidad tienen determinados hábitos, usos, costumbres, gustos, necesidades y problemáticas propias que conforman su cultura.
Así como los griegos tenían su Ágora, hoy tenemos lugares comunes para los habitantes de una determinada zona de la ciudad. En ellos, los vecinos tienen la posibilidad de desarrollar participaciones que redundan en beneficio del conjunto, y por ende, en el propio. Incluso, los requerimientos y demandas que manifiesta, las realiza con la certeza de saberse entendido por su entorno y en beneficio del mismo.
Los vecinos tienen allí un centro de encuentro, diálogo e interacciones entre sí y con el fin de resolver problemáticas propias y comunes como así también plantear acciones conjuntas para la mejora constante de la vida social de una comunidad.
En virtud de ello, proponemos un edificio organizado en tres bloques: servicios, atención al público y ceremonias; con una alta ocupación de suelo y un mínimo desarrollo vertical. De esta manera propiciamos, que la mayoría de las posibles situaciones se desarrollen en contacto con la planta baja y por ende con la plaza diseñada por Clorindo Testa. Para aquellas actividades que se realicen en el primero y segundo piso, procuramos igualmente la conexión con el nivel cero. Para lograrlo disponemos de dos subsistemas: la calle transversal y la fachada permeable. La primera funciona como un conector entre la plaza y los patios internos del CGP generando la iluminación y ventilación necesarias. A través de dos calles transversales el edificio respira.
La fachada permeable permite el aprovechamiento del desarrollo longitudinal que tiene el edificio, virtualizando ese límite y conectando a los habitantes del CGP con el exterior.
Constructivamente se trata de una estructura tradicional de hormigón armado de planta baja y dos pisos culminada con una cubierta metálica que permite reducir la cantidad de columnas en el último nivel y en el espacio del SUM. La imagen del edificio responde a la escala barrial con su fachada ritmada por la secuencia servicios-calle transversal-oficinas. Por otro lado, el CGP dialoga con las vías del ferrocarril en su fachada oeste, mediante una escala mayor lograda con el foyer del SUM.
Advertimos que el desarrollo de la tecnología conecta las personas y simplifica las tareas cotidianas, a la vez que reduce las situaciones de encuentro y elimina la noción de sociedad en conjunto. Allí radica la importancia de proyectar un espacio que integre los valores positivos de ambas realidades y proponga un lugar albergue los actos y ceremonias de nuestra “tribu”.
Concluimos que esta particular pieza urbana merece un protagonismo a la altura del programa que contiene, es decir que sea utilitario, recreativo y simbólico, que representa un escenario de la vida cotidiana.
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